No escribo para vivir, vivo para escribir.
LA MALDAD
(De la obra “Lucha con amor” Ediciones – octubre 2008 – febrero 2015)
Por Helen Fares de Libbos.
Aunque haya gente mala, no vamos a dejar de ser buenos. Los malos tratan de destruir todo lo que uno hace y mientras tanto yo sigo dando amor porque considero, que esta es la mejor forma de vivir. El bien destruye el mal y por eso, aunque unos desean el mal y la desgracia, yo siempre hago el bien.
Siempre tengo la esperanza de que las personas cambien, sean mis amigos o empleados, yo les doy tres oportunidades; primero consejos y cariño, la segunda son regaños y la tercera, seguir con la esperanza.
El ser humano es malo por naturaleza hasta que tiene con la experiencia, la oportunidad de cambiar. En mi país, el Líbano, un consejo vale un camello. Es una ley árabe, porque el Sultán resuelve todo y el que va a pedir un consejo debe llevarle un camello.
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