Por: Laila Libbos
Esta frase es muy común, que frecuentemente y en repetidas ocasiones solemos escuchar, pero al pasar de los años y por mi experiencia, la he asimilado y comprobado que es la pura realidad.
De la forma como pensemos, así mismo debe ser y está la posibilidad de seguir como estoy o de mejorar, si requiero sanar o continuar como estoy, sé que todo lo que en este momento estoy sintiendo, es el resultado de lo antes pensado.
En algunas ocasiones, como todo ser humano, he tenido pensamientos negativos y positivos, además, tenemos la potestad para definir, cual tomar y lógicamente que opte por desaparecer radicalmente los negativos y me quede y ejecute los positivos, hasta llegar a tal punto, que encontré mucha paz interior.
Este ejercicio lo herede de mis abuelos y lo deseo compartir con usted, con el fin de que, por su bienestar, tome la decisión de llevar a cabo sus pensamientos positivos y deje a un lado los negativos.
Es recomendable que este tema lo analice, preferiblemente antes de empezar su rutina diariamente, buscando el momento y el lugar adecuado, siempre repitiendo, que puede ser mentalmente, pero mucho mejor en voz alta las palabras: “gracias a Dios” y “gracias a la vida”
Cada amanecer lo logro, gracias a Dios y al poder de la mente.
