El misterio de las tormentas eléctricas.

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24/02/2021 – Diana Margarita Guio.
Los rayos gamma son la radiación electromagnética de mayor energía en el mundo, podemos encontrarlos en entornos extremos del espacio como las supernovas o los agujeros negros. Estos rayos a menudo son creados por oleadas de electrones que viajan a velocidades cercanas a la velocidad de la luz. Pero en las décadas de 1980 y 1990, los físicos descubrieron que existe una fuente de rayos gamma que se encuentra en nuestro hogar, la Tierra, y son: las tormentas eléctricas.

Los científicos descubrieron que las nubes en la Tierra también emiten rayos invisibles como ráfagas de milisegundos, de resplandores débiles y prolongados. Actualmente, investigadores en Japón están reclutando un equipo de científicos ciudadanos para poder comprender el misterioso proceso que sucede dentro de las nubes de tormenta y que crean ráfagas de radiación.

Pero capturar los rayos no es un trabajo sencillo, pues aunque los satélites han logrado captar destellos de rayos terrestres (TGF), esas mediciones no proporcionan una vista lo suficientemente cercana para entender cómo se produce ese proceso. Es por esto, que los científicos Wada y Enoto se encuentran creando un plan para ampliar su estrategia de trabajo, esta iniciativa la han nombrado Thundercloud Project.

“El misterios es entender cómo puede ocurrir esto en la atmósfera de la Tierra” comenta Wada, físico del Equipo de Investigación de Fenómenos Naturales Extremos RIKEN Hakubi en Saitama, Japón.

Este año, el proyecto tiene como objetivo usar la ayuda de los ciudadanos japoneses creando una red de alrededor de 50 detectores en escuelas, templos y hogares que les permitan captar los rayos gamma para mapearlos y seguirlos en su ciclo de vida. Este es uno de los primeros proyectos que busca aprovechar los resultados a través de la ciencia ciudadana. Kanazawa ha sido el lugar seleccionado por los investigadores, pues es uno de los mejores lugares para capturar brillos y destellos. Se encuentra ubicada en el lado noroeste de la isla central de Honshu en Japón y se destaca por ser una ciudad que ve muy seguido poderosas nubes de tormenta que provienen de Siberia durante el invierno. Estas nubes se ciernen a menos de un kilómetro del suelo, lo que es muy provechoso para los investigadores. El clima que ofrece la ciudad es el indicado para que Wada y Enoto instalen el dispositivo que espiará las tormentas que emiten radiación.

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El proyecto Thundercloud inició en 2015, cuando Enoto regreso de Estados Unidos y revivió su pasión por explorar señales extrañas similares a ruidos captadas por puestos de monitoreo de rayos alrededor de centrales nucleares. Los detectores confirmaron que tales picos provenían de las nubes de tormenta invernales.

Es por esto, que Enoto tenía en sus planes fabricar detectores de rayos baratos que se pudieran instalar en varias ubicaciones. Wada se unió al equipo y dirigió el diseño de estos dispositivos compactos que se construyeron con una mini computadora Raspberry Pi de US $60 junto con cristales de germanate de bismuto, un material que se ilumina cuando es golpeado por fotones de rayos. “Es una fusión de mundos” dice Wada.

A finales de este año, el grupo de trabajo espera reclutar más participantes en el esfuerzo de ciencia ciudadana, se espera tener 50 detectores en funcionamiento y 100 el próximo año. Esta matriz cubrirá la región de aproximadamente 1 kilómetro de distancia. Los datos que ofrecerá el proyecto son invaluables, comenta Enoto, revelando características como la estructura de las nubes: geometría, tamaño y color durante las tormentas. “La gran pregunta que quiero saber es, ¿qué tipo de tormentas eléctricas pueden generar rayos? No sabemos cuál es la diferencia entre el tipo estándar de tormenta eléctrica y el tipo extraño que muestra rayos”.

Fuente:
https://www.nature.com/articles/d41586-021-00491-4

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