(De la obra “Canto a la vida” Edición abril de 2010)
Por Helen Fares de Libbos
SE ESCRIBE LO QUE SE SIENTE… Yo no puedo fijar tarea a mi mente para escribir.
Escribo lo que siento y además, uno escribe siempre lo que puede no lo que quiere…
Escribir es de alguna manera, un reflejo de la sociedad que estamos viviendo… Sí, es un reflejo pero también es una maravilla, poder escribir y leer en dos idiomas, en nuestra propia lengua materna a tantos escritores diferentes y tanta literatura tan diversa.
Esa sí es una riqueza incomparable.
Cumplo 40 años, trabajando en todos los campos, en relación con el arte, la construcción, finca raíz, artículos manuales y diseños de interiores.
Autora de libros y álbumes de enseñanza sobre la comida árabe para los niños, fotografía, clases en universidades de comidas internacionales, comentarios sobre la economía de cocina, experiencia en la construcción y varias obras terminadas…
Mi consejo: recibir y poner en práctica los consejos de quienes mediante el dolor y el tiempo, han adquirido la experiencia. Es difícil poner en práctica la experiencia ajena. No es fácil porque cada ser humano es un mundo diferente…
No permito que mi destino dependa de la suerte. Siembro mis objetivos y esfuerzos para llegar al éxito. Considero que he pasado mis pruebas con valor. Sólo tengo que disfrutar de lo que he ganado…
Hago hoy algo totalmente espontáneo sin pensar en las experiencias del pasado o en las consecuencias del futuro… Observo cómo me comunico con el mundo a través de los ojos, los oídos, los labios y las manos…
Cada día tomo unos minutos para escuchar mi silencio.