Es la primera causa de esta enfermedad en no fumadores.
Por Myriam Manosalva | 10/04/2021.
El radón es un gas incoloro, inodoro e insípido lo que lo hace altamente peligroso, ya que pasa desapercibido por quienes lo consumen, debido a que este gas penetra en las viviendas a través de diminutas grietas de los hogares y lugares de trabajo, hasta conseguir enormes concentraciones.
Este elemento es un gas radioactivo que procede de la descomposición del Radio 226 presente en todas las rocas de la corteza terrestre que forman el subsuelo del terreno. La desintegración del uranio genera la formación del radio, y la desintegración del radio da origen al radón.
Dada su condición de gas, el radón puede filtrarse con gran facilidad a través de las porosidades del terreno y llegar a la superficie. La presencia de esta sustancia no constituye un problema para la salud en espacios abiertos, pero en lugares cerrados puede ser letal, ya que es la causa más importante de cáncer de pulmón después del tabaco, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La OMS calcula que el radón causa entre el 3 y el 14% de todos los cánceres de pulmón en cualquier país del mundo y suele acumularse en las áreas más bajas de las casas debido a que pesa nueve veces másque el aire.
Para precisar los porcentajes de radón en un hogar debe solicitarse un servicio de medición, lo cual cobra importancia cuando se entiende que la existencia de este gas en casa es la primera causa de cáncer de pulmón en quienes nunca han fumado y la segunda en los que fuman o son exfumadores.
Para evitar el daño de esta sustancia se aconseja identificar si se vive o trabaja en una zona de riesgo, ventilar el lugar para renovar el aire y consultar con un especialista para erradicar esta nociva sustancia de sus espacios.