(De la obra “Si tu no perdonas, el pasado perdona” Edición noviembre de 2020)
Por Helen fares de Libbos
Soy ajena a este mundo y hay en mi exilio una severa soledad y una dolorosa tristeza…
Estoy sola, pero en mi soledad contemplo un país desconocido y encantador…
Esta visión llena mis sueños de una tierra tan grande y lejana que mis ojos nunca han visto.
Soy una extraña entre mi gente y no tengo amigos.
Cuando veo una persona me digo a mi misma,
¿quién es ella?
¿de qué manera la conozco?,
¿por qué está aquí?,
¿qué ley me la ha unido a ella?
Soy extraña a mí misma, cuando me oigo hablar con mi propia lengua, mis oídos se asombran de mi propia voz.