Por Gustavo Castro Caycedo.
Vi con atención un video que envió un gran señor, y reflexioné: qué tal que el presidente Iván Duque en lugar de su inmensa irresponsabilidad, de su obstinada miopía, y de su obsesiva egolatría, tuviera una milésima parte de la inteligencia, la grandeza en la sabia elementalidad, la honestidad social, la coherencia y la claridad conceptual que caracterizaron a Álvaro Gómez Hurtado.
De haber sucedido así, Colombia no sería el mar de lágrimas precipitado por los errores, equivocaciones, ineptitudes gubernamentales que han precipitado a la desesperanza al 80% de los colombianos; como lo avala el resultado de todas las encuestas nacionales de opinión.
No dejante haber despilfarrado imperdonable e impúdicamente cientos de miles de millones de pesos para contrarrestar inútilmente el cada vez más desastroso rechazo nacional, Duque ha continuado malgastando millones en presuntuosos planes de egocentrismo y narcisismo “canjeando premios ”internacionales por dádivas aduaneras y privilegios comerciales para los benefactores de galardones.
INSÓLITA CAMPAÑA MEGALÓMANA
Duque, como no lo hizo nunca presidente colombiano alguno, ha dilapidando durante tres años inmensos recursos; entre otras cosas en su fracasado programa de televisión; en el derroche de una continuada insólita campaña megalómana de imagen, en medios de comunicación, redes, vallas, y hasta publirreportajes.
Y se sabe que ahora hasta mandó acuñar vanidosas “monedas forradas en oro, y con su nombre”.
Ha votado muchísimos millones en inútiles mediciones y encuestas de opinión que siempre lo rajan; en los informativos y la programación pro-gobierno en los canales del Estado.
En la inmensa pauta de radio y televisión que todos los días atiborra cadenas y emisoras de radio, canales de TV, páginas Web , y youtubers “enmermelados”, difusores de propaganda y de solidaridad boletines de la Presidencia de la República, de algunos ministerios y de entidades oficiales.
CAMPAÑAS “ITINERANTES ORQUESTADAS
El derroche de millones y millones también financia campañas itinerantes “orquestadas” con atril y comitivas áulicas, como la de los ridículos shows mediáticos sobre la llegada al país de las primeras vacunas.
O como su “tour en tricimoto” plagado de promesas mentirosas e incumplidas, como esa de los 100 días para reconstruir a la devastada Providencia, lo cual cínicamente, (a pesar de decenas de registros de prensa), niega hoy su compromiso.
O las decenas de promesas que no han pasado de ser publicidad en visitas a pueblos y ciudades de Colombia, desde donde hoy le reclaman el incumplimiento sistemático de su palabra empeñada, en la que ya pocos creen.
Luego de la hecatombe de muerte, destrucción, caos, quiebras y vandalismo que propició con su prepotente “reforma Carrasquilla”; disque para sacar al país en la quiebra por su irresponsable despilfarro de los productos dineros públicos, se inventó el mentiroso “plan de Austeridad
Restrepo”, que ya está incumpliendo.
Con adjudicación de contratos de lo inútil y con el despilfarro de más millones en “monedas ególatras” con su nombre, a manera de medallistas milagrosas.
INVITACIÓN A ESCUCHAR A ÁLVARO GÓMEZ HURTADO
Así continúa el pecado del despilfarro de dineros sagrados que debían ser destinados a los pobres que invoca Álvaro Gómez Hurtado, que no “mantenidos”, como lo llamó su irrespetuosa e inútil Vice y Canciller.
Ante tanta insensatez, mentiras, irresponsabilidad, derroche de recursos públicos, y desprecio a las grandes necesidades de los jóvenes y de un pueblo abandonado que “se muere de todo”, resuenan las palabras magníficas de Gómez Hurtado contra la indolencia oficial. Utópico pero deseable que Iván Duque las hubiera interiorizado.
Gracias a Dios, a Colombia le queda menos de un año de tan pesada, triste y horrenda pesadilla que sigue aún su marcha con hechos aberrantes y “abudinantes” de corrupción billonarios como el protagonizado por la caída ministra de las Tic, resuelto simplemente con una renuncia.
Solo me resta invitarlo a usted a que escuche al gran estadista Álvaro Gómez que perdió Colombia a muy mala hora.
El docto Alvaro Gómez Hurtado se estará revolcando en su tumba de ver que un egresado de su Universidad es Un payaso que nunca debió haber llegado a la presidencia de la República.
Formidable escrito apreciado Gustavo y rescate del vídeo de ese hombre sacrificado por criticar el sistema anacrónico que nos gobierno. Felicitaciones