Por Leonardo Rincón | 07/05/2021.
Muchas veces cuando los pescadores están desarrollando sus labores, entre sus pescas, logran capturar hembras de tiburón, que en muchos casos vienen con huevos y son solo detectados cuando están en el proceso de limpieza de la especie.
La asociación Cayume, está dedicada a la conservación de las especies en la isla de Mallorca. Han logrado salvar huevos de escualos, en total 9 que ya están en proceso de incubación; estos casos no son muy comunes ya que en España hay leyes que controlan la pesca y más la preservación de la fauna marina. Como es el caso de Malta, donde en abril nacieron los primeros 5 tiburones, sumándose otros 4 esta semana.
El proyecto, EGGCASE 2020, ha logrado recuperar huevos de tiburones y rayas que son pescados de manera accidental, en acuerdo con Cofradía de Andratx y con la lonja de Palma, permite que los voluntarios puedan recoger los huevos y ser transportados desde La Lonja hasta el Laboratorio de Investigaciones Marinas y Acuicultura de Andratx, el centro de investigación que cuenta con los equipos requeridos para la eclosión de estos huevos y la futura preservación de la misma especie, al momento que los huevos broten, son cuidados por unas semanas para estudios y luego una posterior liberación en las aguas del mar.
Cuando nacen son alimentados por medio de pinzas con carne (trozos de mejillones, boquerón y calamar en salsa de aceite de bacalao para que sea más fácil la digestión). En noviembre se liberaron 3 especies de rayas: raya de clavos, raya de espejos y raya pintada, que después de 50 días fueron liberados para no criarlos bajo cautiverio sino darles una nueva oportunidad a estos seres que muy posiblemente hubieran desaparecido por la pesca.
Según la fundación, Save The Med, en el año 2020 se logró establecer que de las 58 especies de tiburones que hay en el mar mediterráneo, 28 se encuentran en peligro de extinción y dos ya son consideradas extintas. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, manifiesta que “la idea es seguir con el proyecto con la intención no tanto de salvar especies, sino de completar una metodología que funcione, un aprendizaje que nos permita centrarnos después en las especies vulnerables y darle también difusión a su parte educativa”, confirma Guillem Félix, presidente de Cayume.
Se espera que para finales del mes de mayo las especies que se encuentran en incubación logren eclosionar y puedan ser liberados para hacer un seguimiento a la especie y así lograr su preservación.