A través del cine comunitario Luis Alexander Díaz Molina busca empoderar a niños y jóvenes entre los 7 y 16 años de la vereda El Charquito, Soacha, para que logren apropiarse de su territorio y construir ciudadanía en medio de la ruralidad.
Por Rubén Palacios | 08/04/2021.
Usualmente, la visión que tienen del mundo tanto los niños como los adolescentes se soslaya. Sus comentarios suelen ser tomados por hilarantes o irreverentes. Probablemente porque persiste en el imaginario colectivo la idea de que carecen de criterio y un buen juicio.
Sin embargo, Luis Alexander Díaz Molina, magíster en Comunicación y Medios de la Universidad Nacional de Colombia, opina todo lo contrario. Así lo manifestó en 2016, cuando decidió emprender un proyecto en la vereda El Charquito del municipio de Soacha para involucrar a los niños y adolescentes de esta zona en la producción de un documental interactivo, que tenía por objetivo fomentar la apropiación del territorio y construcción de ciudadanías infantiles y jóvenes.
De acuerdo a Díaz, su primera motivación fue la necesidad de que la sociedad reconozca que los más jóvenes tienen mucho que aportar para discutir problemáticas, y así construir y consolidar una sociedad más ecuánime y plural en cuanto a participación se refiere. Y agrega que “a veces esperamos que un joven que cumple su mayoría de edad ya sea un ciudadano que participa, que está empoderado y que interactúa con la sociedad, cuando durante su infancia y adolescencia nunca lo hemos puesto en ejercicios de participación”.
Por ello, decidió emprender este proyecto de forma conjunta y colaborativa con la Universidad Minuto de Dios, sede Soacha, y el colectivo Soacha en imágenes. Justamente con el propósito de generar diálogo con los más jóvenes a través del cine como un medio y recurso pedagógico, práctico y participativo.
Varios años después de la realización y lanzamiento del documental, titulado de forma homónima al lugar donde fue producido, Díaz retomó el proyecto en medio de su trabajo de grado para el título de magíster. Esto con el fin de revisar experiencias específicas y determinar tanto alcances como límites que pueden tener en el futuro proyectos similares a este.
Tras concluir este segundo momento con el documental, Díaz afirmó que “fue interesante ver el cambio y la percepción de ellos sobre el proceso en el que habían participado; también con los talleristas, que en ese momento me ayudaron en esta tarea. En una charla recordaron cómo había sido el paso a paso, hablando de aprendizajes y dificultades, deconstruyendo ese proceso”.
Finalmente, Díaz aseguró que el cine comunitario es un medio y una herramienta idónea para que vincular a todas las comunidades en los debates importantes. Además, al permitirles acceder a los medios, se les garantiza el derecho de comunicarse de forma abierta, y así ayudarles a participar de forma empoderada en todos los procesos de diferente índole que se den en sus territorios.
Para ver el resultado final de este proyecto puede ver el documental en el siguiente enlace: www.elcharquitodocumentando.com