Por Leonardo Rincón | 19/04/2021.
Según un estudio de Global Financial Integrity (GFI), en Colombia se pierden más de 150.000 hectáreas de bosques tropicales por consecuencias como explotación forestal ilegal, ganadería o siembra de cultivos ilícitos, provocando que muchos de estos bosques tropicales sean quemados o talados para su venta y con esto la GFI confirma que se están perdiendo miles de millones de pesos por la exportación ilegal de madera.
Entre el 2008 y 2019 se generó una pérdida de US$65 millones para Colombia, dado que cerca del 40% de todas las exportaciones de madera que se realizaron fueron de manera ilegal; ya que en el análisis comercial se comparan las exportaciones generadas con las importaciones recibidas, de las cuales no hay coincidencia y se evidencia irregularidades comerciales.
Sin embargo, la GFI asegura que en este periodo de tiempo hubo una brecha de US$165 millones por concepto de exportaciones y derivados de las mismas; el caso que más llama la atención es la exportación que se realizó con Panamá donde hubo una rotura por un valor de US$37.3 millones de dólares, lo que se asume como una cuarta parte del total del desfalco.
Una medida que se sugiere es que la DIAN haga el respectivo control con más rigurosidad respecto a los valores que se están facturando y los valores reales, ya que hay transacciones de estas exportaciones que están por debajo del promedio o muy por encima del mismo, al igual se pide que los entes de control soliciten la facturación de origen del producto para acreditar al mismo.
Esta mala práctica afecta no solo al ecosistema sino que también genera un impacto negativo sobre los esfuerzos que los diferentes entes encargados realizan al momento de reforestar los bosques tropicales ya que no se ejerce ese control necesario, teniendo en cuenta que esto también afecta a nuestros indígenas, a la economía y el cambio climático.