Por: pantallazosnoticias.com.co
En general, no es posible saber por qué una persona padece cáncer y otra no. Pero la investigación ha permitido concretar qué factores de protección hay.
«El principal, dejar de fumar. En cuanto a la alimentación, lo cierto es que nadie desarrolla un cáncer por comer mal, es muy, muy difícil comer así de mal, ni ninguna alimentación sana te protege frente al cáncer», aseguró Alberto Muñoz, profesor de Investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Instituto de Investigaciones Biomédicas de Madrid.
Pero lo que sí es importante frente a muchas enfermedades (no solo cáncer) es tener «unos niveles normales de hormonas tiroideas y vitamina D», recordó Muñoz durante la primera jornada de divulgación científica organizada por la Fundación PharmaMar, en colaboración con la Asociación Nacional de Informadores de la Salud
En todo caso, «la edad es el mayor factor de riesgo para padecer cáncer, ya que las células con mayor tiempo de vida son más proclives a originar cánceres», explicó Muñoz, uno de los especialistas en cáncer más relevantes y prestigiosos del país y presidente de Fundación de Investigación de HM Hospitales.
«Se debe potenciar –prosiguió–todo lo que es prevención, como son los test de sangre en heces frente al cáncer de colon (más barato que las colonoscopias y menos invasivo)» y apostar por la investigación.
En este sentido, «todos los genes no son importantes en el cáncer, todos los pacientes no son iguales y todas las terapias no son igual de eficaces», incidió el experto. Así, «hay tres o cuatro tipos de genes implicados en cáncer. Y el 90% de los casos de muertes por cáncer es por metástasis. Es muy raro que sea por un tumor primario. Además, cada tipo de cáncer tiene un número variable de mutaciones (la frecuencia de mutación espontánea sin fumar y haciendo vida sana es de un millón por gen y por división celular), y lo importante es ver cuáles son las mutaciones clave para estudiar cómo inhibir sus efectos sobre las células. Y no solo son importantes las mutaciones, también lo son las alteraciones epigenéticas, que son el conjunto de modificaciones químicas del ADN y sus proteínas asociadas (histomas) que modulan o regulan la transcripción de los genes. Esto sucede cuando vemos que un cáncer no tiene mutaciones», detalló.
Pero es que a pesar de que nuestros tumores tienen cientos de mutaciones, «puede darse el caso de que inhibir una sola mutación (con un fármaco) funcione por ello los inhibidores de PARP se usan en clínica de pacientes con cáncer de mama y ovario con genes BRCA 1/2 mutados».
En cuanto a la metástasis, cada tipo de tumor tiene uno o más lugares preferentes para hacer metástasis. Así, el cáncer de colon puede hacer metástasis «sobre todo en hígado y alguna vez en pulmones. Lo más difícil de todo es entrar en el cerebro y pese a ello hay ciertos cánceres que causan metástasis cerebrales».
Respecto a las terapias, conocer las mutaciones facilita predecir lo que va a pasar y tomar decisiones terapéuticas: terapias clásicas (cirugía, radioterapia y/o quimioterapia y hormonoterapia) y terapias dirigidas o nuevas, que modifican las características o viabilidad de las células cancerosas provocando diferenciación o muerte o regulando la senescencia (que las células normales dejan de proliferar y no se mueven).
En cuanto a las terapias anti-diana, para Muñoz los protac (compuestos que inducen la degradación selectiva intracelular de una proteína protumoral/oncogénica) llegarán a la Medicina, «no me cabe duda».
Y respecto a la medicina personalizada, el experto explicó que «es posible el cultivo y la congelación y descongelación de organoides humanos de tejido colónico sano y tumoral», de modo que se congela un tejido tumoral y se usa un fármaco para ver si funciona. «Parece que si una droga no funciona en un organoide no va a funcionar en un paciente. Ahora bien, falta que se confirme», recordó.
En cuanto a las CAR-T, que ya hay de segunda, tercera, cuarta y quinta generación, el futuro pasa por lograr que funcione para tumores sólidos. «De momento se están salvando vidas de niños (ciertos linfomas B y ciertas leucemias B), pero no hay CAR-T para tumores sólidos. Si se va a conseguir más lo dirá el tiempo y lo dirá la clínica», incidió Muñoz que dejó claro que en la lucha contra el cáncer se está avanzando y lo esperable es que se logre la cronificación de los cánceres más que la curación».