Barcelona, 9 oct (EFE).- Grifols ha alertado hoy que la crisis de la COVID-19 está empezando a causar “escasez de plasma”, en Europa principalmente, por lo que ha llamado a los países europeos a adoptar un modelo “similar al de EEUU”, donde el sistema más frecuente es la recompensa económica al donante por el tiempo empleado.
La afectación de la crisis de la COVID-19 sobre las donaciones y las investigaciones de Grifols en el terreno del plasma para ayudar en la lucha contra esa pandemia ha centrado la atención de la Junta General de Accionistas, que se ha celebrado de forma telemática.
El presidente de la compañía, Víctor Grífols Roura, ha asegurado que Europa no es “autosuficiente, ni mucho menos”, en el abastecimiento de plasma para producir medicamentos plasmáticos, ya que solo Alemania y otros pocos países de Europa lo son.
“Europa es totalmente dependiente del plasma de EEUU, y ahora, cuando habrá cierta escasez, es lógico que Europa lo sufra más que en EEUU, porque ellos proveen el plasma”, ha dicho el presidente de la multinacional, que ha recordado que por esa razón Grifols compró centros de donación de plasma en Alemania y trabaja en obtener también plasma de países como Hungría.
“Seguiremos empujando para que Europa sea consciente de una vez, que se ponga las pilas y se dé cuenta de la importancia que tiene el plasma para ella misma”, ha asegurado, y se ha mostrado convencido de que China será también algún día autosuficiente, pero ha añadido: “No estoy es tan seguro de que Europa lo conseguirá”.
Por su parte, el co-consejero delegado de Grifols, Víctor Grífols Deu, uno de los hijos del presidente de la multinacional, ha explicado que al conocer la incidencia del virus en China ya enviaron cartas a las agencias sanitarias que les tutelan, tanto en España como en Europa, para advertirles de que la COVID-19 “podría generar una potencial disrupción en los medicamentos” elaborados a partir de proteínas plasmáticas.
Y es que ha explicado que la crisis de la COVID-19 ha llevado a los donantes de plasma a tener “miedo” a acudir a los centros de donación, y al no donar con tanta asiduidad se ha generado “una escasez de plasma”, con lo que ha admitido que la industria está “muy preocupada” por ello.
No obstante, Grifols ha ratificado hoy que cerrará el año con los mismos niveles de abastecimiento de plasma que en 2019, por la mejoría de los últimos meses, y que en 2021 los aumentará un 30 %.
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En cualquier caso, el directivo ha hecho suyo el pronunciamiento público de la Plasma Protein Therapeutic Association (PPTA), en el sentido de que “necesitamos más plasma”, y ha añadido que la industria conoce la solución a este problema, que pasa por que “en algunos países” europeos “cambie la regulación para que se permita un modelo similar al de EEUU”, ha dicho.
Pese a la crisis, Grifols ha puesto de manifiesto en la Junta que ha cumplido sus objetivos de ventas hasta septiembre y que la pandemia tampoco ha frenado su expansión internacional.
La cúpula de Grifols ha agradecido a sus 24.000 empleados sus esfuerzos por mantener activa toda la compañía durante la pandemia y ha recordado que actualmente Grifols lidera o participa en 25 ensayos clínicos relacionados con la COVID-19.
Precisamente hoy la multinacional ha anunciado que ha iniciado el ensayo clínico para testar su inmunoglobulina anti-SARS-CoV-2 en pacientes con COVID-19 como potencial tratamiento contra el virus.
Durante la Junta, Víctor Grífols Deu ha subrayado que, salvo en la vacuna, Grifols está presente en los otros dos retos que ha generado la pandemia, el de encontrar un tratamiento y el de desarrollar un test para diagnosticar el nuevo coronavirus, algo que logró “en apenas tres meses”, ha resaltado.
En este punto, el responsable financiero de Grifols, Alfredo Arroyo, ha asegurado que las ventas de test COVID están impulsando la división de Diagnóstico, y ha resaltado que Grifols ha destinado 3.150 millones a inversiones productivas e innovación en los últimos cinco años.
Por otra parte, la Junta ha avalado las cuentas de 2019 y ha certificado que seguirá destinando el 40 % de sus beneficios a remunerar a sus accionistas, de forma que se destinarán 250 millones a dividendos en 2019, lo que equivale a 0,36 euros por acción.
Un total de 0,20 euros de esa cantidad ya se abonaron a cuenta el pasado mes de diciembre, mientras que los otros 0,16 brutos por acción se harán efectivos a partir del próximo 28 de octubre.
La Junta ha servido también para elegir como consejero al ex embajador de EEUU en España James Costos y para reelegir a Víctor Grífols Déu, Thomas Glanzmann y Steve F. Mayer.EFE
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