Por Daniel Eduardo Jiménez Zambrano | 11/04/2021.
Un informe presentado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), advierte que los países en condición de vulnerabilidad recortan gastos para la protección de la infancia, la nutrición y los servicios de agua, saneamiento e higiene, para poder cubrir su deuda.
Henrietta H. Fore, directora ejecutiva de UNICEF, advirtió que 25 países pertenecientes a todos los continentes enfocaron su presupuesto al servicio de la deuda, en lugar de la educación y la salud, además enfatizó en que el principal perjudicado es la niñez debido a que no se garantiza educación de calidad y servicios básicos de salubridad, vulnerando sus derechos.
“Los costos personales y públicos son enormes, y llevan a que los niños, sus comunidades y sus países tengan muy pocas esperanzas de lograr un desarrollo económico y social sostenible”, declaró Henrietta Fore.
El organismo internacional recalca que la pandemia por Covid-19, es un detonante negativo para los países de bajos recursos, por lo anterior, los Estados miembros del G20 acordaron una iniciativa denominada: “suspensión del servicio de deuda para el periodo de abril de 2020 a junio de 2021”, en la cual solo hay participación (hasta la fecha) por 46 naciones que reúnen las condiciones para beneficiarse del programa.
Deserción escolar y trabajo infantil
La pandemia también agudizó el abandono escolar debido a que niñas y niños tienen la necesidad de trabajar para buscar un sustento diario, por lo anterior, ONU recalca que los gobiernos de turno deben velar por la protección de la infancia para garantizar la nutrición y los servicios básicos, ser garantes del acceso al agua, saneamiento e higiene. Así como entender del riesgo de perder toda una generación, lo cual “sería un freno al desarrollo nacional de cada país estancándolo de forma mayor en la pobreza”.
“La pandemia ha provocado una catástrofe educativa mundial que es necesario abordar desesperadamente para evitar que la generación del COVID-19 se convierta en una generación perdida. Sin embargo, debido a la emergencia y a la carga de la deuda a la que se enfrentan los países, ya estamos viendo una contracción de los presupuestos para la educación en un momento en que los países necesitan invertir en la mejora de las escuelas y en los sistemas educativos”, afirmó Fore.
Con lo anterior, el Fondo de la ONU propone reestructurar la deuda internacional permitiendo alivios financieros para los países de recursos limitados, anunciando mayor apoyo y condiciones favorables para los países pobres más endeudados.
“El alivio y la reestructuración integrales de la deuda son esenciales para garantizar una recuperación inclusiva y sostenible, de modo que los niños no tengan que soportar la doble carga de la reducción de los servicios sociales ahora y el aumento de la deuda en el futuro”, finalizó la Dirección ejecutiva de Unicef.