Inés Amarelo, México, 10 jun (EFE).- El reconocido actor indígena mexicano Tenoch Huerta consideró en una entrevista con Efe que es urgente que México acepte el racismo existente en el país, igual que Estados Unidos ha hecho desde hace años, para así poder combatir esa lacra.
“Me parece de una mezquindad brutal voltear hacia otro lado y decir ‘pinches pobres, pinches mugrosos son pobres porque quieren y porque no se esforzaron’, que son discursos muy comunes en México. Estas actitudes tienen que ser desterradas y que tenemos que hacer el ejercicio de mirarnos en el espejo y dejar de señalar con nuestro dedo flamígero a Estados Unidos”, dijo.
Tras la muerte de George Floyd, un hombre negro fallecido a manos de policías el pasado 25 de mayo en Mineápolis, las redes sociales se abarrotaron de mensajes de rabia por el racismo imperante y las calles de múltiples ciudades del mundo se llenaron de personas pidiendo justicia.
Personas influyentes de todo el mundo utilizaron la etiqueta #BlackLivesMatter y en México no fue menos, hasta que apareció la controversia después de que muchos consideraran que, aunque la violencia policial contra las personas negras en Estados Unidos es evidente, no hay que olvidar que en el país latinoamericano el racismo es un grave problema estructural.
Y con esta postura coincide el actor que participó en grandes producciones como la serie “Narcos: México” (2018) o la película “El Autor” (2017), quien también dijo que “compañeros de profesión tienen #BLM en sus redes sociales pero prefieren ignorar la realidad del racismo en México”.
“Creo que es importante que entre todos hagamos las reflexiones que nos corresponden en los países en los que estamos y a partir de ahí podamos construir. Si no entendemos que existen clasismo, machismo y racismo, este país no va a salir adelante”, expresó Huerta.
El actor también ha tomado protagonismo en el activismo al posicionarse a favor de muchas causas sociales.
Y con el racismo siempre ha sido muy contundente, defendiendo la igualdad de oportunidades y criticando la falta de conciencia generalizada acerca de este tema, que impide cualquier otro tipo de avance en otras materias.
POCOS AVANCES Y MALOS ENFOQUES
Tanto es así que mientras muchos mexicanos se volcaban con el #BlackLivesMatter, apareció la semana pasado un vídeo en redes sociales donde se veía el arresto del joven obrero Giovanni López en Guadalajara, en el occidental estado de Jalisco, presuntamente por no llevar cubrebocas, y que finalmente falleció a manos de la policía.
En este sentido, Huerta dijo que cabe preguntarse “¿si ese chico hubiera nacido del otro lado de la ciudad, del otro lado de la calzada, donde se autodenominan chavitos bien, hubiera amanecido con un balazo?”. Para él la respuesta es evidente: no.
“La gente en México está siendo torturada, detenida y racializada por su condición económica y racial, y las razas no existen pero el racismo sí”, sentenció el actor.
Por esto, para Huerta los avances son pocos y, aunque ha habido intentos, los enfoques han sido equivocados. A veces, dijo, se habla de personas de la historia mexicana que eran indígenas como si por haber sido reconocidos como individuos el problema hubiera terminado, pero no ha sido así.
Asimismo, recordó que el problema del narcotráfico es una consecuencia de la falta de atención a problemas como la pobreza, el racismo o el clasismo, ya que muchas personas recurren a estas actividades ilícitas porque es la única vía para ascender en la escala social ante la inexistencia de “otras puertas abiertas”.
ARTE QUE NO ROMPE NO ES ARTE
En relación a la injusticia social, el actor cree que los artistas y el arte tienen que formar parte de la necesaria transformación social aprovechando el altavoz que su reconocimiento les otorga.
“Considero que es parte de lo que un artista tiene que ser: tiene que cuestionarse y cuestionar el mundo en el que vive. Un artista que solo vive para la farándula y para tomarse fotos es un farandulero. Si el arte no rompe, destruye e irrumpe de manera incluso estridente no es arte”, sentenció.
Y de la misma manera, el cine, que es su campo, debe modificar las narrativas y dejar atrás la reproducción de estereotipos, como relacionar la clase baja con lo “sórdido brutal y animal” y la clase alta con lo “bonito, aspiracional y personas que luchan y salen adelante”, terminó el actor.
Huerta se encuentra en cuarentena reflexionando sobre estos y otros temas que le atañen como persona, como actor, como padre y como mexicano, ya que el rodaje de la serie “Mexica” junto al español Javier Bardem que cuenta la historia de la llegada de Hernán Cortés y sus tropas a México ha sido pausado debido a la actual crisis del coronavirus. EFE
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