
Por Fernando Calderón España
Lo dicho aquí.
Las pandemias tienen una sola ventaja. Hacen crecer las fortunas. Así lo reportó FORTUNE. Bezos de Amazon pasó de los 200 mil millones de dólares que le servirán para brillar su calvicie.
Un decreto presidencial en Colombia, con el pretexto loable de reactivar la economía, autoriza el trabajo por horas, sin costos laborales que habría en una contratación normal. Las empresas van a bajar sus “costos a costa” de la fuerza de trabajo. Plusvalía creo que se llama eso.
Ahora, Avianca recibirá del gobierno 370 millones de dólares que me imagino no pagará nunca porque esa platica se irá volando.
Eso es bueno, si uno no supiera que sus dueños tienen cómo garantizar préstamos para salvarse. Pero, no. El sentido humanitario del ejecutivo se antepone al menoscabo de la riqueza particular. Es una teoría buena para cuando todos seamos millonarios.
Mientras tanto el que tuvo una empresa pequeña o mediana y quebró por el “hijueputa” virus tendrá que ir, cuando todo se “normalice” a su banco de “confianza” a pedir un crédito para volver a arrancar de cero. Es que en Colombia somos tan patriotas que nos encanta comenzar de cero.
Un amigo mío me dijo que se estaba reactivando la venta y compra de apartamentos, oficinas y locales. Claro. Los están vendiendo para no colgarse en las cuotas de los créditos con los que habían comenzado y necesitan estar al día para volver a prestar para “arrancar de cero”.
En Colombia tenemos la ventaja de que amamos el neoliberalismo que muchos confunden con el nuevo liberalismo de Galán. Creen que es lo mismo.
De todas maneras, tener un modelo como el que nos da palo, cada vez que lo salvamos, ya es una FORTUNA. Y eso nos hace sentir ricos.
Hay que darle gracias a la vida. Tenemos dos mares, montañas, agua, caminos y lindas mujeres, así nos toque comenzar de cero.
Ah y a James que gana por todos. Por fortuna.