San Francisco, 2 sep (EFE).- La multinacional estadounidense Microsoft anunció este miércoles una nueva plataforma inteligente para luchar contra los “deepfakes” o vídeos manipulados que ofrece al observador un porcentaje a tiempo real con las posibilidades de que cada fotograma haya sido adulterado.
La plataforma, bautizada “Video Authenticator”, está diseñada para captar las modificaciones en fotografías y vídeos llevadas a cabo por parte de sistemas de inteligencia artificial, de alta precisión y que normalmente son prácticamente imposibles de detectar para el ojo humano.
El año pasado esta técnica de falsificación de vídeos levantó todas las alarmas cuando el consejero delegado y cofundador de Facebook, Mark Zuckerberg, dijo que no tenía intención de censurar estos contenidos manipulados cuando los usuarios los colgasen en la red social o en Instagram, de su propiedad.
A los pocos días, apareció en la red un vídeo manipulado del propio Zuckerberg.
“Imagina esto por un segundo: un hombre, con un control total de datos robados de miles de millones de personas, todos sus secretos, sus vidas, sus futuros”, manifestaba de forma adulterada el máximo responsable de Facebook, en una aparente descripción de su persona.
Junto al de Zuckerberg, también aparecieron vídeos de este tipo del presidente de EE.UU., Donald Trump, del actor Morgan Freeman, de la celebridad Kim Kardashian o de la artista serbia Marina Abramovic.
En paralelo a “Video Authenticator”, Microsoft también anunció hoy una herramienta integrada en el sistema de computación en nube Azure que permite a los productores de contenido agregar hashes (que identifican los archivos de forma inequívoca) y certificados a sus piezas, quedando así integrados en sus metadatos y dejando una huella de confianza allá donde se alojen los ficheros online.
Otras de las novedades en este mismo sentido es un lector que puede utilizarse como una extensión de navegador o en otras formas alternativas, y que verifica la huella incluida en los archivos para que los consumidores de contenido, con alto grado de precisión, puedan saber que el contenido es auténtico y que no ha sido modificado, así como proporcionar detalles sobre quién lo produjo. EFE
arc/hma