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Por www.lafamilia.info
Los abuelos suelen jugar un papel fundamental en la vida de sus nietos. Ya sea que compartan con ellos el día a día por ser responsables de su cuidado, o bien que solamente se vean en ocasiones especiales (por ejemplo, porque los hijos viven en ciudades diferentes a la de sus padres), son incontables los beneficios que les trae a los niños compartir tiempo con sus abuelos. Aquí nombramos solo algunos.
Brindan protección y cuidado
Ante la ausencia de papá y mamá, ¿con quién se sienten más seguros los niños? Fácil: con sus abuelos. Su cariño y sus abrazos son un buen sustituto de los padres. Algunos –los llamados abuelos canguro- de hecho, pasan más horas cuidando de sus nietos que los padres, ocupados con largas jornadas laborales.
Los conectan con su historia
Conversar con los abuelos les brinda a los niños perspectivas más amplias. Los ayuda a comprender que son parte de una familia más grande, a conocer su pasado, su herencia cultural y, en algunos casos, religiosa. Los abuelos funcionan como los portavoces de la historia de cualquier comunidad.
Les enseñan muchas cosas
Es mucho lo que los niños pueden aprender de sus abuelos: desde recetas de cocina hasta nuevos cuentos, desde cómo cuidar un jardín hasta otro método para resolver las tareas escolares. A su vez, ¡también los abuelos pueden aprender de los más pequeños! Los niños funcionan como excelentes maestros en cuestiones tales como manejar las nuevas tecnologías.
Jugar con los abuelos es muy divertido. Sin las presiones por cumplir con todas las tareas domésticas que tienen los padres, y sin el agotamiento tras largas jornadas laborales, los abuelos disponen de más energía para organizar actividades recreativas, como dar un paseo por el parque o llevar a los niños al cine. Además, no están pendientes de ponerles límites a los nietos. Vamos, que esa es nuestra tarea. Los mayores ya nos criaron a nosotros, ahora les toca disfrutar de lo más bonito de la infancia de nuestros hijos.
Ofrecen amor incondicional
Por supuesto que el principal beneficio de contar con abuelos presentes en la vida de cualquier niño es que ellos siempre brindan amor, escucha y paciencia. Siempre están pendientes de la felicidad de sus nietos, de sacarles su mejor sonrisa y de consolarlos si hay alguna pena o dolor. No hay nada que haga más feliz a los abuelos que ver felices a sus nietos. Y los quieren tal como son. ¿Qué más podemos pedir de un vínculo tan hermoso?
*Publicado en El Blog El bebé de París
