Santiago de Chile, (EFE).- La economía de Chile cayó el 11,3 % en agosto, mes en el que comenzó el desconfinamiento de gran parte de Santiago, el principal epicentro de la pandemia de coronavirus en el país durante meses, informó este jueves el Banco Central.
El Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec), que reúne al 91 % de los bienes y servicios del producto interior bruto (PIB), se encuentra por encima de lo que esperaban los mercados, que proyectaban una caída de solo un dígito tras la positiva sorpresa de julio, cuando la economía se desplomó un 10,7 %.
“La recuperación todavía no está asegurada y depende de muchas cosas. El tercer trimestre va a seguir siendo negativo, pero menos malo que el segundo trimestre, y esperamos empezar a ver las primeras cifras positivas en el cuarto trimestre”, dijo el ministro chileno de Hacienda, Ignacio Briones.
Las actividades más afectadas fueron los servicios y la construcción, y, en menor medida, la industria manufacturera, mientras que en los servicios destacaron las caídas de educación, transporte y restaurantes y hoteles, aunque “compensó parcialmente este resultado el crecimiento del comercio”, indicó el banco.
“Si hay algo que nos ha enseñado esta crisis es los enormes grados de incertidumbre que tiene. Tenemos señales en la dirección correcta, pero hay que analizarlas con cautela. esto no se retoma con piloto automático”, añadió Briones.
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El emisor apuntó además que el Imacec no minero, que excluye a la minería, cayó en el octavo mes del año un 12,2 %, mientras que el minero disminuyó un 3,4 %, su primer retroceso interanual desde el pasado noviembre y su peor desempeño desde el inicio de la pandemia en marzo.
La poderosa industria de la minería de Chile, el primer productor mundial de cobre, ha mantenido las operaciones pese a la pandemia, que ha provocado casi 463.000 infectados y 12.800 muertos y convierte al país en el duodécimo más afectado del mundo, según la Universidad John Hopkins.
La serie desestacionalizada, agregó el banco, creció el 2,8 % respecto del mes precedente y disminuyó el 11,5 % en doce meses.
La pandemia remite en Santiago, donde la mayoría de barrios han sido desconfinados y avanzan en el plan para reactivar de manera gradual la economía, aunque aún preocupa la zona norte y sur del país.
El PIB chileno se contrajo en el segundo trimestre un 14,1 %, la mayor caída desde 1986, y el emisor estima una recesión de hasta un 5,5 % este año por el coronavirus.
El Gobierno chileno anunció el domingo ambicioso plan de incentivos a la contratación por 2.000 millones de dólares para tratar de contener la tasa de desempleo, que llegó hasta el 12,9 % en el trimestre móvil junio-agosto, una cifra levemente más baja al máximo histórico registrado en el periodo anterior (13,1 %). EFE
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