Los Ángeles, 9 ago (EFE).- Una iglesia en el sur de California desacató este domingo la orden de un juez de realizar servicios religiosos al interior del templo elevando el desafío a las restricciones impuestas por el gobernador Gavin Newsom para contener los contagios en el estado, que registra el mayor número de casos de COVID-19 en Estados Unidos.
Imágenes de medios locales mostraron a decenas de feligreses que llegaron al servicio dominical en la iglesia Godspeak Calvary Chapel, en el condado de Ventura, en un claro desafío a las órdenes dadas el viernes pasado por el juez Matthew Guasco, que prohibió la realización de servicios al interior del templo.
La demanda fue presentada por las autoridades del Condado, después que la iglesia y su pastor, Rob McCoy, no cumplieran con las restricciones impuestas en julio tras el rebrote del coronavirus, que llevó a California a ser el estado con más casos positivos en el país.
El gobernador Gavin Newsom prohibió los servicios al interior de templos, restaurantes, gimnasios y salones de belleza, entre otros establecimientos, como una medida para tratar de detener la nueva ola de contagios que hasta este sábado reportaba 545.787 casos positivos, y 10.189 muertes relacionadas con el coronavirus.
McCoy ha sido un crítico abierto de los cierres de iglesias desde abril, en un momento acusando a Newsom y a las restricciones de exceso “draconiano”, y ha dicho en varias ocasiones que está dispuesto a ir a la cárcel en lugar de obedecer las reglas.
En la demanda presentada en el Tribunal Superior del condado de Ventura, el condado y el oficial de salud pública, Robert Levin, dijeron que McCoy y Godspeak Calvary Chapel habían violado las órdenes, causando “un daño grande e irreparable” al público al crear un riesgo significativo.
La querella legal también argumenta que los acusados han creado una molestia pública. Este domingo varias personas con mascarillas, y cuidando el distanciamiento social se apostaron frente a la iglesia en protesta por el desacato a la corte.
El juez Guasco, calificó el litigio como “un tema constitucional muy importante y profundamente fundamental”.
“La Constitución no es un pacto suicida”, abonó Guasco. “El ejercicio de las libertades individuales tiene que ser compatible con la salud pública; de lo contrario una anularía a la otra”.
La policía del condado de Ventura dijo este domingo en un comunicado que no tomaría acciones para hacer cumplir la orden del juez porque no querían irrumpir en una iglesia.
Este no sería el único desafío en la Costa Oeste de Estados Unidos este fin de semana. En el paseo marítimo de Portland, el sábado por la noche, cientos desafiaron las órdenes estatales de evitar las reuniones masivas para frenar propagación de la COVID-19 en Oregon.
La reunión fue convocada por Sean Feucht, un controvertido líder religioso y activista político que ha celebrado servicios similares al aire libre en las playas de California, realizando bautizos masivos.
En declaraciones al programa Fox & Friends Weekend este domingo, Feucht dijo que “blancos, afroamericanos, hispanos, vinimos y lanzamos nuestra canción de esperanza sobre esta ciudad”.
Feucht estimó que entre 4.000 y 7.000 personas asistieron al masivo servicio religioso al aire libre que tuvo lugar a pocas cuadras de la corte federal. EFE
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