Cochabamba (Bolivia), 12 ago (EFE).- La ciudad boliviana de Cochabamba nuevamente tiene acumuladas en sus calles toneladas de basura, que no pueden ser recogidas por los bloqueos que rechazan el nuevo aplazamiento de las elecciones bolivianas y por un conflicto de la empresa que se encarga del servicio, en medio de la emergencia sanitaria por la COVID-19.
Las calles de la ciudad central de Cochabamba acumulan al menos 5.000 toneladas de basura que no han podido ser recogidas y depositadas en el relleno sanitario de K’ara K’ara por al menos diez días, explicó este miércoles a Efe el gerente técnico de la Empresa Municipal de Servicio de Aseo (EMSA), Moisés Atue.
El paso al relleno sanitario nuevamente fue bloqueado por protestas en rechazo a la nueva fecha de elecciones, el 18 de octubre, determinada por el órgano electoral, que inicialmente ya había sido postergada del 3 de mayo al 6 de septiembre por la pandemia.
La empresa usualmente recoge alrededor de 500 toneladas diarias de basura, que ahora se acumulam en las calles o en los domicilios, entre las que se estima que hay unas 70 toneladas de residuos infecciosos de hospitales, que no pueden ser trasladados en medio de esta crisis sanitaria por la COVID-19, indicó Atue.
A este panorama se le suma un conflicto de EMSA por la gerencia de la empresa, que derivó en una vigilia que realizan sus trabajadores desde hace unos seis días.
Los funcionarios exigen la reincorporación del exgerente Cristian Cuéllar, ya que a su juicio su destitución fue irregular y sin argumentos válidos.
Atue sostuvo que una vez que haya seguridad para los trabajadores y se depongan estos bloqueos, inmediatamente volverán a sus funciones para recoger los desechos acumulados, que podrían ser retirados totalmente en una semana.
El paso a este relleno sanitario ya fue bloqueado un par de veces antes en medio de la cuarentena y la emergencia sanitaria por grupos de vecinos que exigían elecciones y la destitución de la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, entre otras peticiones.
Cochabamba, una de las principales ciudades de Bolivia con algo más de 600.000 habitantes, vive además una situación dramática por el colapso de hospitales y falta de insumos médicos como el oxígeno medicinal, vital para pacientes de COVID-19, y los bloqueos por la crisis política.
Bolivia reporta 3.761 decesos y 93.328 casos confirmados de coronavirus, según datos oficiales del Ministerio de Salud. EFE
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