Por Maria Alejandra Tangarife Toro | 15/04/2021.
La palabra shooting en inglés puede traducirse como tiroteo o como filmación. Actualmente, en Estados Unidos, se han incrementado los shootings, lastimosamente, en el primer sentido de la palabra.
Según cifras del presidente estadounidense, Joe Biden, a diario mueren hasta 106 personas por armas de fuego; por la sucesiva calamidad de los tiroteos. Desde hace un tanto, las artes visuales han fungido como detectives detrás de esa huella roja que flagela a toda una sociedad. Por ejemplo, Bowling for Columbine, un documental realizado por Michael Moore, relata de forma integral no solo la masacre en una secundaria de Columbine ocurrida el 20 de abril de 1999, sino que también intenta desentrañar el motivo por el que ocurrió, reivindicando a las víctimas y poniéndole nombre propio a los victimarios.
Este documental es totalmente satírico frente a la sociedad estadounidense que defiende el uso libre de armas. De hecho, inicia con una frase potente: “era una mañana como cualquier otra en EE. UU.: el presidente bombardeaba otro país cuyo nombre no sabemos pronunciar”. Pues de esta forma y otras, en la película se construye una crítica sólida frente a la política armamentística de ese país, al carácter bélico de las relaciones geopolíticas que desde allí se generan y al cierto espíritu desmedido de violencia que ronda a los altos mandatarios.
Sin duda, después de los sucesos del 9 de septiembre de 2001 se generó una paranoia civil, a raíz no solo del atentado como tal, sino del discurso de combate al terrorismo que se proclamó desde la Casa Blanca. De esa forma, muchos ciudadanos y ciudadanas empezaron a considerar que estar armados era una responsabilidad y que no había mayor honor que “defender” aquello tan subjetivo como lo que solemos llamar “sano” y “correcto”.
El director de Bowling for Columbine guía la conversación con cada personaje, lanza preguntas astutas y a través del humor cuestiona las posturas de aquellos individuos y agremiaciones a favor de las armas. Los hallazgos o conclusiones a las que llega nos hacen ver que no es tan difícil encontrar el por qué de los repetitivos tiroteos.
Para agregar al contexto de esta problemática social y política, Si algo me pasa, los quiero, relata con pocas palabras el sentimiento de la pérdida de un ser amado en esa circunstancia. Es un corto animado realizado en el 2020 que dibuja la soledad, la impotencia, desorientación y el dolor de una familia que es desintegrada por las balas.
Dos años atrás, en 2018, se realizó el corto documental Lecciones de un tiroteo escolar: cartas desde Dunblane. Este audiovisual recoge a través de la relación epistolar entre dos sacerdotes el proceso de sanación y recordación de tiroteos escolares. Uno de ellos, desde Dunblane, Escocia, vivió el tiroteo en una primaria en 1966; el otro, apenas está afrontando la pérdida e impacto en la vida de 26 niños de Connecticut.
En este caso, la producción hace un pequeño recuento de las cicatrices físicas y psicológicas en las personas que viven dicha situación, las preguntas que se hacen, la necesidad de espiritualidad para afrontarlo y la importancia de compartir experiencias para fortalecer el proceso de recuperación en una comunidad. Es importante resaltar que además se deja claro que, a pesar de que en ambos lugares se vivió la misma tragedia, en Escocia se logró imponer una de las políticas más fuertes frente al control de armas; situación que en Estados Unidos cada Estado intenta enmendar, pero poco efectivo resulta.
Por ahora existe una expectativa frente a las nuevas leyes que pueda impulsar y aprobar el gobierno estadounidense. Pero, en el entretiempo, es importante que la comunidad nacional e internacional se dé cuenta, a través del cine, de la cantidad de aristas que componen ese problema de armas, las causas y los retos para enfrentarlo.
Así que de las producciones anteriores y ante el desolador panorama que vemos en las noticias, no deja de ser potente pensar en el siguiente mensaje de una de las películas: “el amor, aunque se vea débil, siempre triunfará sobre el odio y la maldad”.
