Guillermo Ximenis, Londres, 3 jun (EFE).- Las cuarentenas de 14 días que se impondrán a los viajeros que lleguen al Reino Unido a partir del lunes han puesto en pie de guerra a la industria turística británica, que representa en torno al 6 % de la economía del país y alerta del riesgo de frenar tanto las llegadas como las salidas de turistas.
La ministra de Interior, Priti Patel, se enfrentó hoy en el Parlamento a un aluvión de críticas por parte de diputados de su propia formación, el Partido Conservador, que advierten de que están en riesgo cientos de miles de puestos de trabajo si se ponen trabas a los desplazamientos internacionales durante los meses de verano.
Patel recalcó que el Gobierno continúa negociando “corredores aéreos” con países que se consideren “seguros”, si bien avanzó que esas excepciones no entrarían en vigor al menos hasta la semana del 28 de junio, cuando está programado que se revise la efectividad de las cuarentenas.
La viabilidad de esos corredores dependerá asimismo de la evolución de la pandemia en el Reino Unido, el país con más muertes confirmadas en Europa por COVID-19.
El Ministerio de Salud informó hoy de 359 nuevos decesos por coronavirus, hasta un total de 39.728, y de la detección de 1.871 contagios en 24 horas.
La imposición de cuarentenas ha generado una profunda controversia política, pero tiene el apoyo de la mayoría de los votantes. El 63 % de los británicos respalda que todas las personas que lleguen al país se aíslen durante dos semanas, mientras que tan solo un 4 % cree que no debe imponerse encierro alguno, según una encuesta de YouGov.
“Sabemos que esto va a suponer dificultades para la industria turística”, admitió la ministra en la Cámara de los Comunes, al tiempo que recalcó que las medidas “tienen el apoyo de la ciencia y de los ciudadanos, y son esenciales para salvar vidas”.
PESO ECONÓMICO DEL TURISMO
El sector teme que las cuarentenas forzadas paralicen la llegada de turistas al Reino Unido, que el año pasado recibió 40,9 millones de visitantes, que dejaron en el país 28.400 millones de libras (31.800 millones de euros), según los datos de la oficina nacional de turismo (VisitBritain).
De manera directa, la industria turística genera en torno a 1,5 millones de puestos de trabajo en el Reino Unido y representa un 5 % del mercado laboral.
También hay miedo a que el aislamiento obligatorio dificulte los viajes de los británicos al exterior, dado que estarán obligados a permanecer dos semanas en su domicilio al regresar.
Las salidas de los británicos al extranjero suponen unos 72,8 millones desplazamientos al año, el 22 % de ellos hacia España, su destino más popular, según un informe elaborado por el Parlamento británico.
CRÍTICAS DESDE LA INDUSTRIA
Más de 200 firmas han urgido al Gobierno en una carta conjunta a retirar las cuarentenas y negociar cuanto antes corredores aéreos con otros países.
Hoteles, restaurantes y operadores turísticos se han unido para criticar que el Gobierno ignoró sus llamadas para imponer restricciones a la llegada de viajeros al inicio de la crisis del COVID-19, cuando la expansión del virus estaba en su máximo pico, y ha “procrastinado hasta un punto absurdo” algunas medidas para respaldar al sector.
El director ejecutivo del aeropuerto londinense de Heathrow, John Holland-Kaye, ha insistido en que el Ejecutivo debe evitar que “la pandemia sanitaria se convierta en una pandemia económica”.
El responsable de la aerolínea británica easyJet, Johan Lundgren, ha advertido por su parte de que las cuarentenas “restringirán de manera severa la conectividad del Reino Unido” y congelarán rutas internacionales que hacían escala en aeropuertos británicos.
Al mismo tiempo, las Cámara de Comercio de Londres, que representa a más de 2.000 empresas, ha señalado que la imposición de cuarentenas afectará al conjunto de los sectores económicos, al trasladar la imagen de que el Reino Unido está “cerrado para los negocios”.
PUENTES AÉREOS
El diario “The Telegraph” asegura que el Gobierno británico ha comenzado a negociar con España, Portugal, Grecia y Francia la posibilidad de establecer rutas aéreas privilegiadas que permitan a los turistas evitar las cuarentenas.
“Cualquier acuerdo internacional será bilateral y se pactará con aquellos países interesados. Debemos asegurarnos de que esos países son seguros”, afirmó la ministra de Interior.
El ministro portugués de Exteriores, Augusto Santos Silva, ha confirmado que hay contactos con las autoridades británicas en esa dirección.
“La cuarentena es un enemigo del turismo”, dijo a la cadena BBC Radio 4 el ministro portugués, que aseguró que los británicos serán “bienvenidos” en su país este verano.
El Gobierno de España indicó la semana pasada que trabaja en corredores seguros para que algunas regiones, inicialmente las islas Canarias y Baleares, puedan comenzar a recibir turistas extranjeros, posiblemente alemanes y escandinavos, desde la segunda mitad de junio.
Sobre el Reino Unido, el Ejecutivo ha señalado que, aunque se conversa con turoperadores como TUI y Jet2holidays, los datos de la pandemia en ese país todavía “tienen que mejorar”. EFE
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