05/03/2021 – María José Pinto.
Tras el fuerte ataque que sufrió Irak, el Papa Francisco quiere intentar mediar ante estos sucesos, viajando en medio de la pandemia y de la fuerte ola de violencia que se esta viviendo en ese país actualmente.
En medio de tanto suburbio el Papa Francisco toma la decisión de viajar y dar apoyo a este país que lleva años en medio de conflictos armados, sufriendo cada vez más ataques, hambre, desidia, pobreza y persecución religiosa.
“No se puede desilusionar a un pueblo por segunda vez” fueron las palabras de Francisco en su audiencia semanal. La primera decepción, fue cuando el pueblo iraquí esperó al Papa Juan Pablo II, quien no pudo asistir a los encuentros por prohibición de la Santa Sede en 1999.
Por otro lado, el Papa emérito Benedicto XVI califica como peligroso el viaje. Sin embargo, es necesario para calmar las aguas entre ambos países.
El viaje inicia hoy 5 de marzo hasta el 8 de marzo, serán 3 días donde el mismo Papa se hará llamar “Peregrino” con el objetivo de sanar heridas y dar paso a la hermandad.
Este acto también busca estrechar lazos con la religión del Islam Chiita, Francisco se reunirá con la máxima autoridad chií el ayatolah Ali Al Sistani y marcará un hito en la historia ya que viajará en medio de conflictos, donde han prohibido reuniones y declararon toque de queda y no le quitemos protagonismo a la pandemia del Covid-19.
El Papa quiere enviar un mensaje de esperanza a todos los religiosos que han sido perseguido durante mucho tiempo, y dejar en claro a la humanidad la importancia de estar unidos en tiempos difíciles.
Entre Misas, discursos, reuniones y oraciones, así será su agenda durante los próximos tres días, “deseo encontrar a este pueblo que ha sufrido tanto” manifestó.
Cabe destacar que será el primer viaje que realiza el Papa Francisco luego de aplicarse la vacuna contra el Covid-19 y en medio de la pandemia.
